19 de abril de 2009

Momentos felices


Yo mido mi felicidad de acuerdo a la cantidad de momentos felices que me tocan vivir. Hoy disfruté uno de ellos.
La historia empieza así: Siete menos cuarto DE LA MA – ÑA – NA, del día domingo, amanece Emma, bajóóóóóóóóóón, a demás se había despertado como seis o siete veces durante la noche, y a mi, me tocaba estar a las 9:30 en lo de mi suegro. La buena noticia es que yo organizaba una reunión familiar en su casa (Rafael Nofal), para celebrar la reinauguración del “Horno de barro” con un espectacular chanchitooooooooooo.
Realicé una de mis mejores obras en el arte culinario, en vida me hubiera imaginado que podía hacer una cosa tan rica, el chancho se desarmaba, todo gracias a que el muchacho que nos lo vendió, nos dio a probar un pedazo de vacío de chancho IM – PRE – SIO – NAN – TE!!! y me asesoró para realizar una excelente compra.
Mis intensiones eran compara un chanchito entero y tirarlo en el horno, le pedí a Fabían y a mi hermano que me acompañe para no ser el único responsable de una mala compra, el maestro que nos atendió nos dijo que lleváramos piezas de chancho y no un lechón entero por que perdíamos mucho con los hueso y él nos ofrecía sólo buena carne, lo cual no fue mentira. Nos mostró una deliciosa pierna, que fue devorada, doblamos la apuesta con un muy buen pedazo de vacío y completamos con un costillar. Todo esto lo humedecimos con unos espectaculares vinos y me convertí en la estrella de la tarde.

Muchas gracias carnicería Bety!!!, compre siete kilos y medio de chancho para siete personas, muchííííííííííísimooooooo, cuando es sólo carne, si hubiera sido un chanchito entero tendríamos mucho hueso, pero cuando me di cuenta de la cantidad que había comprado lo llamé a mi viejo y a mi hermano, con quienes almuerzo todo los domingos y a quienes había tachado para comer esa belleza, y los terminé invitando para poder cubrir los gastos. Ta’ dura la calle primo.
Fue una aprobación unánime, todo el mundo estaba disfrutando de esta grosería de placer que había cocinado, hasta yo me sorprendía, con decirles que Mariana dijo que estaba rico, un pedacito, el primero. Bue.... algo es algo.
Cuando terminamos de comer y yo creía que la estaba pasando bien, y me regocijaba con las adulaciones, llegó el mejor momento, nos fuimos con Fabián a comprar un dulce para que acompañen el café, mientras yo seguía con el vino, cerveza con chancho hace mal, pasé por mi casa y saqué un cañito que tenía armado, y a partir de ese momento, toda la historia cambió, había terminado mi trabajo de asador y me tomé unos minutos para estar con Emma y tuve, con V para vos flaco botón, un hermoso flash con mi hija, salimos caminando y conversando, en el idioma de ella por supuesto. Da deu da, bebe un catum, hasta una canilla de agua que hay en el fondo y me colgué hablando y riéndome con ella, y no de ella como piensan muchos. Cuando llegamos hasta el caño, empezó a meter el dedo por el pico esperando que salga la última gotita que queda colgando, mientras yo pedía a gritos una máquina de fotos para poder grabar ese momento, miraba por el agujerito esperando que salga la gota, me miraba y me decía, abue bue cucu y yo me desmayaba de la risa. Lamentablemente no había cámara y me tomé un minuto para grabar, en mi escasa memoria, esos instantes, ya que se estaba convirtiendo en un momento feliz de mi vida.
No les voy a mentir, esto seguro que disfruté mucho haciendo ese festín, y comiéndolo por supuesto, con el atenuante que desde el martes estoy a dieta y sólo como verdura y tomo caldo, pero el tiempo que pasé con Emma fue lo mejor de todo, el flash del caño y nuestra conversación definitivamente pasaron a ser uno más, de mis momentos felices.

PD: no hay fotos, por que como dije no había cámara

16 de abril de 2009

Vamos por buen camino


Una vez más me lanzo a la popularidad con el estudio de diseño, en esta ocasión con nombre nuevo: “estudio nueve”. Al parecer “Mil demonios” predisponía mal a la gente, la que todavía no está lista para solicitar servicios a los demonios, prefieren algo menos diabólico.

Llevo dos semanas saliendo a la calle y con el apoyo de muchos amigos, ya logré darle marcha a la producción, sobre todo al desarrollo web. Tengo propuestas de volantes, folletría y carpetas institucionales. Espero empezar a trabajar con la parte de cartelería y rotulación de vehículos.

La temática es la siguiente, salgo todas las mañanas a la calle a buscar clientes y por las tardes trabajo en la máquina haciendo diseño. Ya tengo los contactos para poder dar muy buen servicio en los rubros donde yo aporto y facturo el diseño.

Espero que a través de este medio pueda recibir un poco más información y/o trabajo, desde ya les doy las gracias a todos los que me están dando una mano y a los que me apoyan en este proyecto que requiere de mucho huevo, por lo menos en un principio.


MUCHAS GRACIAS